Aquellos Años (2015-2019) … Soy migrante en tierras quiteñas, cerquita del “Cielo”

Mi Viejo Coro Colonial

Remolino de Nostalgias

¡Añoranzas (1)!

Iniciando esta nueva etapa de mi blog, quiero compartir con ustedes un artículo publicado en el Diario “La Mañana”, de la ciudad de Santa Ana de Coro, de fecha viernes 25 de abril de 2003, titulado: “Psicología del coriano según cronistas coloniales”, escrito por una persona al cual respeto y admiro, Pedro Da Costa Gómez.

Escribía, en su modesta opinión, son dos los factores básicos que modelan el carácter o la idiosincrasia de los diferentes pueblos de la tierra.

Son: 1) La herencia; 2) El medio ambiente. Son ellos los que, en último término, dan a cada pueblo su fisonomía característica, su semblanza propia, sus virtudes y sus defectos. Otros factores, tales como la educación o la falta de educación, la cultura o la ignorancia, pueden, mejorar o empeorar algunos rasgos de esa fisonomía congénita, pero nunca cambiarla o transformarla radicalmente. Sangre y tierra, herencia y medio geográfico, son los dos troqueles que define los rasgos fundamentales de las colectividades humanas.

La marcada influencia de esos dos factores pueden observarse mediante el análisis de la virtudes y defectos que caracterizan tanto al indígena coriano como al coriano actual, que hoy llamamos “falconiano”. La fisonomía típica del “coriano” es fruto de una herencia ancestral, que llevamos en la sangre, y del medio ambiente geográfico en que nacimos y vivimos. En consecuencia, para delinear debidamente esa fisonomía característica, esas virtudes y defectos congénitos del “coriano”, es necesario remontarnos en el curso de la historia hasta encontrarnos con nuestros antepasados aborígenes y estudiar, al mismo tiempo, las condiciones telúricas del suelo nativo. La trataré de hacer modestamente en este artículo.

¡La Herencia! Dos razas aborígenes poblaban el actual territorio falconiano, cuando el conquistador español llegó a esta tierra. Eran: a) Los Caquetíos; b) Los Jirajaras. Caquetíos eran los pobladores de las tierras planas o llanas. Los Jirajaras poblaban las la tierra, altas o montañas. En este artículo me limitare a los Caquetíos, que, como dije antes, eran pobladores de las zonas llanas del actual Estado Falcón, es decir, todo el litoral desde Coro hasta las márgenes del Lago de Maracaibo, la península de Paraguaná y por el este, la llamada Costa Arriba desde la Vela hasta los límites con Yaracuy.

A continuación, expondré brevemente algunos datos o testimonios que sobre la idiosincrasia del aborigen caquetío nos trasmitieron cronistas coloniales: 1) Juan de Ampíes, fundador de Coro, en carta al Rey, dice de los Caquetíos lo siguiente: “Son gente de más razón y habilidad que otros indios de estas partes”. 2) El Gobernador Pérez de Tolosa los describe así: “Gente muy pulida y limpia, con mucha caza y pesca y ropa de hamaca”. 3) El primer Obispo de Coro, Rodrigo de Bastidas, en carta al Rey desde Santo Domingo, el 30 de enero de 1535, dice: “En verdad todos los Caquetíos que yo vide es muy buena gente, doméstica y dispuesta para que en ellos imprima la verdad cristiana”. 4) En sus “noticias Historiales”, Fray Pedro Simón afirma que los Caquetíos aborrecían tanto la traición que “aún a los conejos y venados, cuando los cazaban, no querían tirar estando echados, porque decían que era matarlos a traición”.

¡El Medio Geográfico! El coriano caquetío era hijo de su ambiente, del medio geográfico en que nació, vivió y murió. El sol, la llanura, los veranos, la escasez de agua, el clima ardiente, la llanura abierta, dejaron en él su impronta indeleble. El hombre es como el árbol: o se asimila al ambiente o muere.

Como el cují, el árbol heráldico de la raza caquetía, el coriano, tanto el aborigen como sus descendientes, lleva en su sangre la huella imborrable de la geografía o del ambiente. He aquí un resumen de las virtudes y defectos raciales del coriano:

Primero: El coriano es pacífico y manso, aunque a veces esa mansedumbre llega al extremo de la indolencia y la apatía.

Segundo: El coriano es dócil y sumiso. Por eso Coro ha sido en la Historia de Venezuela, el pueblo menos levantisco, incluso en la etapa de la independencia.

Tercero: El coriano es hidalgo y es leal. Esa lealtad del coriano explica su resistencia a sumarse a la declaración de la independencia; fue leal al Rey hasta el fin.

Cuarto: El coriano es hospitalario. Es la virtud característica de los pueblos en tierras áridas y predesérticas, como los pueblos árabes.

Quinto: El coriano es sufrido. La dura naturaleza en que nace, vive y muere, le ha dado capacidad innata para el sufrimiento y la penuria.

¡Citas célebres…!

“Viéndolo bien no somos tan viejos, lo que pasa es que tenemos muchas juventudes acumuladas” (Francisco Arámburo).

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